La fundición a presión es una técnica de metalurgia que permite la fabricación de piezas con formas complejas, en la mayoría de los casos de mayor resistencia y calidad. Dados los estrictos requisitos de industrias como la automoción, la electrónica y los bienes de consumo, el control de calidad de los productos fundidos a presión es imperativo. En la fundición a presión, las medidas integrales de control de calidad no solo mejoran el rendimiento del producto, sino que también mejoran la minimización de los residuos, reducen los gastos operativos, ahorran tiempo de entrega y mejoran la productividad. Este artículo investigará cómo se maneja el control de calidad en la producción de fundición a presión y discutirá las mejores prácticas en relación con la calidad en los segmentos de control y emisión de calidad.
Procesos clave en el control de calidad de la fundición a presión
Inspección de materiales Es bien sabido que los productos fundidos a presión de calidad dependen en gran medida de la calidad de las materias primas utilizadas en su fabricación. El procedimiento comienza con el examen y la aprobación de metales fundidos como aluminio, zinc o magnesio. Es muy importante que estos materiales cumplan ciertas especificaciones tales como la pureza y la composición, así como las propiedades mecánicas. Estas medidas se realizan con mayor frecuencia que no incluyen pruebas químicas e investigación microscópica para controlar cualquier contaminante y defectos estructurales.
Los moldes son partes cruciales de cualquier sistema de fundición a presión y su estado, a su vez, contribuye a la calidad del producto final. Es esencial limpiar siempre el molde e inspeccionarlo por desgaste y por sus dimensiones para reducir la aparición de defectos como flash, porosidad o desalineamiento. El diseño y el rendimiento óptimos del molde se pueden mejorar mediante la aplicación de herramientas avanzadas de simulación del flujo del molde.
Inspección dimensional El componente fundido a presión fabricado debe confirmarse con sus dimensiones a lo que se esbozó en el diseño de las piezas. Las modernas máquinas de medición de coordenadas (CMM) y los métodos ópticos de control se utilizan activamente para evaluar la geometría de los elementos fundidos diseñados. Si alguna desviación geométrica es responsable de tales discrepancias, serán detectadas y corregidas por los fabricantes antes de que los productos se liberen para la producción real.
Superficies e inspección visual La calidad de la superficie es un factor de calidad aceptado en la fabricación de fundición a presión. El equipo automatizado y la inspección manual pueden cubrir una gama de indicaciones de defectos superficiales, incluyendo, pero no limitado a grietas, hoyos, ampollas, deformación, etc. Otros métodos como los rayos X y los ultrasonidos también se utilizan con el propósito de encontrar defectos que no pueden detectarse a simple vista.
Prueba de propiedades mecánicas Junto con el determinismo gráfico, otro aspecto importante de las pruebas mecánicas es determinar si una pieza fundida a presión posee las propiedades requeridas de resistencia, dureza y durabilidad. Las pruebas de tensión, dureza y fatiga de un producto se realizan para asegurarse de que el producto está bien dentro de los parámetros que se esperan de la industria y los consumidores. Estas pruebas prescriptivas son críticas especialmente cuando los componentes están bajo alta tensión, por ejemplo, componentes de automóviles.
Control y monitoreo de procesos En las modernas instalaciones de fundición a presión, se han empleado sistemas de control avanzados en las tareas de controlar parámetros como la presión, la temperatura y el tiempo de enfriamiento durante la operación de fundición. La consistencia del proceso es muy central en el aspecto de operación y ayuda a reducir las posibilidades de defectos y aumenta la uniformidad. Los procesos como SPC que usan seis sigma se adoptan fácilmente para medir y controlar las desviaciones.
Inspección de acabado después de la fundición Después de la fundición, muchos productos fundidos a presión reciben más procesos de mecanizado o superficiales tales como pulido, recubrimiento, anodizado típicamente. La garantía de calidad lleva a cabo estos procedimientos para garantizar que la funcionalidad y la apariencia del producto terminado cumplan con los criterios de los clientes.
La calidad del producto se confirma además mediante la inspección final realizada antes del envío del producto desde la instalación de fabricación. El “embalaje” de las piezas fundidas a presión se estudia en función de estos criterios con el objetivo de garantizar el envío efectivo de las piezas fundidas a presión a su punto final en las condiciones adecuadas.